Cocina con vistas al jardín

El deseo de los propietarios de esta magnífica vivienda situada a las afueras de Madrid era conseguir una cocina muy luminosa y con vistas al jardín, pero dividida de las otras estancias de la casa. La cocina se equipa con muebles del modelo Karmel blanco seda mate de líneas puras y sin tirador que ayudó a generar un espacio muy luminoso y minimalista.
Para la distribución se opta por una línea de módulos bajos de extracción total, portafregadero, portaplaca y una amplia superficie de preparación para poder contar así con una entrada directa de luz natural. La zona de columnas situada a la derecha, integra electrodomésticos y espacio para guardar los útiles del día a día. Al contar la cocina con una despensa independiente, liberamos el espacio de muebles con gran capacidad de almacenamiento y reunimos sólo lo imprescindible.
Enfrentado al gran ventanal, se dispone una pequeña mesa que completa el amueblamiento y brinda la oportunidad de poder tomar un relajado desayuno con vistas directas al amplio jardín.